in_tenso.... dicese de la tensión interior

Como cada vez, imposible reconocer la imagen del espejo, a veces, parece mejorar, solo a veces y bajo miradas superficiales. Confieso que padezco la enfermedad de los feriantes, siempre odiando la mudanza que viene y anhelando el pueblo anterior. El presente, el presente no existe... solo se creó la ilusión de que se arrastra el inagotable segundero para que parezca que todo cambia constantemente sin que nada suceda. En este luminoso y apabullante Macondo la pegajosa sensación del calor, antecede a la frescura tormentosa del agua, que limpia y canaliza nuestra energía hacia el atardecer de los bares, refugio atómico en el que clandestinamente compartir otra anónima cerveza, con palabras dispersas y sonrisas histrionicas que te reciben como si ayer, que tampoco existe, estuviesen contigo y se retoma la eterna conversación.
Como cada vez, imposible reconocer la imagen que me devuelve el ascensor, mientras aprieto el tres, me miro a las ojeras y reconozco la rutina encerrada en esas pupilas que me miran atonitas preguntandose ¿porque sigues mirando? si eres incapaz de ver...