con sentido

Tórridos pensamientos atravesándome

provocan sonrojo en mis mejillas,

destellos de lujuria en tu mente

reflejándose en la comisura de tus labios.

Quiero tenerte en mi orilla,

pero el mandoble de tu mirada

despeja el humo entre los dos.

No es niebla, no es bruma

es tan solo negrura;

obtusa desgracia que me persigue

que te antecede y da respuesta

a lo indecible, lo no hablado.

P e g a d a l a n a r iz e n e l c r i s t a l

Vuelve el húmedo espacio, donde anida periódicamente la tristeza.

No detengo el tren en esta estación porque paso de puntillas,

por la oscuridad de sus días, la tempestad de sus noches

y los paramos de mi recuerdo.

Siempre anima más el tiempo, a mitad de año;

con largos y ociosos días,

cuando los colores abandonan la tierra

y sucumben a la luminosidad del arco iris.

Dame vida, dame amor y dame fuerzas,

para soportar un poco más, bajo dos toneladas de agua

que no dejan de martillear sobre el frágil cristal

que me separa de la fría realidad.

Regálame la luz de tu sonrisa,

y reflejos desde el fondo de tus ojos,

acaríciame con tus besos y olvidare que el otoño

llama de nuevo al invierno, para sitiar mi jardín y provocar

esa pequeña destrucción que se esconde debajo de la nieve

y no duele porque te congela el alma

hasta la siguiente estación…

N I H I L I S M O ?

Ayer, vi a mi ángel guardián, siempre camina dos pasos por detrás de mí con cuidado de no pisar mi sombra, pero atento a cualquier intento de cogerlo por sorpresa, durante cuarenta años, nunca fui capaz de tener una prueba de su presencia, aun así, siempre notaba su aliento tranquilizador. Y llego un momento, en que me plantee seriamente denunciar a mi psiquiatra, por no ser capaz de diagnosticar una esquizofrenia tan evidente.

Desolado, en la esquina oscura de mi habitación, gemía lastimosamente formando parte de mis pesadillas:

- él, con la certeza de que yo dormía placidamente,

- mientras yo al despertar, imagine que sus lamentos eran los de esa vecinita que todos deseamos tener, y que yo, por desgracia tengo, aunque para mi desgracia, no viva sola.

Pero, como siempre en estos casos la casualidad, provoco la causalidad; mi vejiga nos jugo una mala pasada, despertándome a mi, que soy agnóstico y descubriéndolo a él que debería ser invisible, inaudito, increíble y omnipresente.

De todos modos, estuvo bien, anda algo deprimido, teme que lo despidan por falta muy grave. Hay rumores de ajustes de plantilla que vienen de arriba; le consolé, me lo debía a mi mismo. Pero no intuí lo peor; su soledad, el agradeció salir del anonimato y poder al fin comentarme, sin mucho afán y como desviando la atención, que este corte de pelo no me sienta bien…

Me asaltó un pensamiento peregrino y sin sentido ante tamaño descubrimento, existe el angel de la guarda (que los agnosticos preferimos llamar buena suerte) y el mio no sé, si no será un poquito gay; siempre por detrás, siempre escondido…

Insistí un poco y me lo lleve de copas

No hay nada como salir con alguien de copas para que abandone su mascara y se muestre. Él, conduce, te guía y paga las cuentas pendientes, pero esta vez, se emborracho y aquí me tienes aguantándole la frente, frente a la taza de este maloliente inodoro. Mientras, desconsolado, entre arcada y arcada, confiesa que aunque los ángeles no tienen sexo. Él esta perdidito por una ángela guardiana y como no dábamos excesivo trabajo, se escapaban en las noches oscuras de invierno esas que todos aprovechamos para hibernar en el sofá, mientras la televisión nos recuece los sesos.

Pero, siempre hay un pero, en una de esas citas, la protegida de ángela resbalo al salir de la bañera y allí quedo........... tendida, preciosa, sexy pero muerta y fría….

Cuando lo descubrió, no sabía como enfrentar el fatal descuido, con lo cual, consiguió ocultarlo un poco, pero al final estallo todo el embrollo, con grandes titulares en el Heavenly Post. Por supuesto, fue trasladada al límite fronterizo del purgatorio, donde le esperaba lo mejor de lo peor, a estas alturas y con ese curriculum, vigilando que no escape ningun alma antes de purgar sus menudencias, y pendiente de juicio y condena; con el miedo que da ese sitio, en el limite.

Ahora mi ángel, se ha visto descubierto y anda previendo la visita del máximo expurgador que no permite estas relaciones entre guardianes y las castiga ejemplarizando con la maxima crudeza.

Hasta aqui parecía ir todo mal, pero la suerte estaba de su lado…me tenia a mi…. Un giro inesperado del destino, y yo poseía la clave de todos sus quebraderos de cabeza, le iba a presentar a alguien que solucionaría sus problemas con el altísimo, con el inconmensurable, con dios.

Paradojas de la vida, yo salvando a mi ángel guardián.

Pasaron los días y no sentía su presencia, una sensación extraña tras largos años de intuirlo ahora se había ido, no sé si era a causa de estar tan taciturno o por culpa de otras razones más poderosas, el caso es que ya llevaba conmigo el arma definitiva y en cuanto nos viésemos íbamos a poner fin a esa situación. Al fin apareció, parecía cansado, me miro con ojos taimados y yo le dije:

No conseguí que viniese él pero conseguí su libro sagrado, alarguemos la sonrisa, sacudamonos la distancia y leamos ya sin perder más tiempo, el titulo “así hablo Zaratustra”, ¡extraño titulo! Lo abrimos con un respeto reverencial y hojeándolo, con él mirando por encima de mi hombro, vimos una doblez en una de las hojas y al abrirlo se iluminaron ante nuestros ojos, tres palabras subrayadas que leímos ambos en voz alta como una letanía:

DIOS HA MUERTO

Y dicho esto, justo al dejar de vibrar el ultimo fonema de la frase, me embargo un desasosiego oscuro y humedo, senti la soledad, senti el vacio avanzar hacia mi y rodearme, desapareció todo y todo se detuvo dejándome totalmente solo en este lugubre y frio vació que provoque con tal magnicidio.

Si alguien sabe como rescatarme…….....................................se gratificara.